El grupo ha experimentado un resurgimiento en los últimos años en ciudades de Mass, como Lynn, Lawrence, Worcester, Boston y Haverhill.
El 8 de marzo de 2017, la ciudad de Lawrence, Massachusetts, fue escenario de un crimen brutal. Jaime Espinal, un joven de 18 años que, según sus seres queridos prometía un futuro brillante en el baloncesto, yacía baleado en la intersección de las calles Forest y Crescent.
Espinal fue declarado muerto en el lugar, dejando atrás un legado de sueños truncados y un círculo de amigos y familiares que lo identificaron como una personal leal, con la aspiración de salir del ciclo de violencia que aqueja la comunidad de Lawrence.
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Siete años después, en octubre de 2024, las autoridades lograron avances significativos en el caso. Robert Severino, alias “Petete”, y quien tenía solo 17 años al momento de los hechos, fue arrestado y acusado de la muerte de Espinal. Severino se declaró “no culpable” ante el Tribunal de Distrito de Lawrence, y se ordenó su detención sin derecho a fianza, según confirmó en aquel momento la oficina del fiscal de distrito del condado de Essex.

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“Petete” fue identificado por las autoridades como uno de los miembros del capítulo de Lawrence de “Los Trinitarios”, una de las pandillas más violentas y peligrosas de la región, que opera, en todo Massachusetts, incluidas las ciudades de Lawrence, Lynn, Worcester, Boston y Haverhill, así como en New Hampshire, Maine, y varias instituciones correccionales.
El nombre de Severino reapareció en los medios de comunicación tras el anuncio el miércoles de la radicación de cargos contra dos docenas de líderes, miembros y asociados de la pandilla Los Trinitarios, relacionados con tráfico de drogas, tiroteos y asesinatos en Massachusetts, que incluyen dos que tuvieron lugar en Lawrence en 2017 --uno de ellos el de Espinal-- y dos asesinatos dobles en Lynn en 2023.
El anuncio de este golpe de las autoridades a la violenta pandilla vuelve a traer muchas preguntas, entre ellas: ¿quiénes son Los Trinitarios? ¿Qué los hace tan violentos? ¿Cómo surgieron?
Orígenes de "Los Trinitarios"
Los Trinitarios, una pandilla de origen dominicano, es considerada una de las más brutales, peligrosas y temidas del país.
Las autoridades sitúan su surgimiento en 1993 en Rikers Island, la cárcel de Nueva York. Sin embargo, el detective de la policía de Nueva York, Luis Salvador, reveló en una entrevista con Telemundo en 2018 que pocos saben que los Trinitarios nacieron en la década de los 70. “Es cuando un grupo de presos, descendientes dominicanos y latinoamericanos se unieron para ellos poder protegerse contras las otras gangas que había”, dijo. Con el tiempo, esta costumbre trascendió los muros de la cárcel y se trasladó a las calles, consolidando un sistema bien estructurado.
La pandilla cuenta con una organización jerárquica rigurosa, compuesta por un presidente, un vicepresidente, concejales, guerreros y soldados, según explicó Salvador. Formar parte de los Trinitarios es como ingresar a una familia unida por un propósito común. Su nombre rinde homenaje a los padres fundadores y revolucionarios clave de la Guerra de Independencia de la República Dominicana. Su lema, “Dios, Patria y Libertad”, coincide con el emblema oficial del país. Los colores representativos de los Trinitarios son el verde lima, rojo, azul y blanco, los mismos que figuran en la bandera dominicana, según se menciona en las acusaciones emitidas por el Departamento de Justicia de Massachusetts, tras los arrestos del miércoles.
El machete es el arma predilecta de los miembros de esta pandilla, que siguen ciegamente las órdenes de sus superiores, sin importar la violencia del acto. Aunque el centro de poder tradicional de los Trinitarios se encontraba en Nueva York, los federales informan que el liderazgo más alto de la pandilla estaba principalmente en la República Dominicana.
Su orden jerárquico y la Carta Magna
Tras el anuncio de que un grupo de 22 presuntos miembros de la pandilla había sido acusado de conspiración de crimen organizado, las autoridades federales ofrecieron una descripción detallada de la estructura organizacional de los Trinitarios.
Se dijo que cada estado tenía un líder identificado como el responsable de organizar a los miembros de ese estado en particular. En Massachusetts, había un “Supremo”, que era el jefe de todos los Trinitarios dentro de Massachusetts y responsable de la coordinación con otros líderes estatales y el liderazgo general dentro de la República Dominicana.
Según los documentos de acusación revelados el miércoles, Enmanuel Paula-Cabral, alias “Nelfew”, “Gordo” o “Manny”, supuestamente se desempeña como el Supremo Estatal de los Trinitarios en Massachusetts, responsable de la totalidad de las actividades criminales de la pandilla, la coordinación con otros líderes estatales y la comunicación con el liderazgo de los Trinitarios en la República Dominicana.
Dentro de cada estado, y en Massachusetts en particular, están organizados en grupos más pequeños denominados “Capítulos”. En Massachusetts, había varios Capítulos los que, generalmente llevan el nombre de la ciudad o pueblo donde se encuentra, por ejemplo, Capítulo de Lawrence o Capítulo de Lynn. De manera similar, según las autoridades, los grupos que están encarcelados se organizan en Capítulos, según el lugar donde estaban detenidos. Paula-Cabral también es presuntamente responsable del Capítulo que opera en Manchester, N.H., así como de los Trinitarios ubicados en Maine, donde la pandilla opera un lucrativo comercio de drogas.
“Paula-Cabral, una vez se jactó de que estaba tratando de construir un imperio. Un imperio construido por miembros de pandillas, financiado por el tráfico de drogas y el robo protegido por la violencia”, dijo durante la rueda de prensa Leah Foley, Fiscal de EEUU en Massachusetts.
Luego, cada Capítulo dentro de Massachusetts cuenta con puestos de liderazgo como “primero”, “segundo”, “tercero” y “secretario”. En Massachusetts, supuestamente, Ery Jordani Rosario, alias “Racacha”, ocupa ese puesto.
Estas posiciones de liderazgo, denominados colectivamente “El Gabinete”, son responsables de la administración y operaciones dentro de su respectivo Capítulo. Ellos son los responsables de reclutar nuevos miembros, brindar disciplina a los miembros que violaran las directivas y recolectar dinero en un fondo que se usaba para apoyar operaciones ilegales y proporcionar dinero a los miembros de los miembros encarcelados y sus familias, según las autoridades. Este dinero se generaba a través de la venta de narcóticos y armas de fuego ilegales, así como de robos y otras actividades de crimen organizado, dijeron los federales.
Toda esta estructura, según los documentos de acusaciones, está plasmada en una “Carta Magna”, así como los lemas, símbolos, colores y prácticas.
El miércoles también salieron a relucir entre los nombres de los arrestados el de Abel Severino Reyes, de 21 años, Justin Alba, de 25, Darwin Batista, de 21, y dos menores, uno de 15 y otro de 16, todos del Capítulo de Lynn, quienes fueron procesados el pasado mes de diciembre en relación con el asesinato de dos jóvenes en Lynn, en septiembre de 2023. El día de los hechos, el hermano de una de las víctimas dijo que se encontraban en una fiesta organizada para despedir a un amigo que graduaba y se iba a la universidad cuando comenzó la lluvia de balas.

Reclutamiento e iniciaciones
Los tentáculos de esta pandilla se han extendido a toda velocidad y su razón pudiera estar en lo organizado de su estructura. De acuerdo con los documentos de las autoridades, los Trinitarios de Massachusetts supuestamente reclutan nuevos miembros entre las comunidades de inmigrantes legales e ilegales de la República Dominicana, específicamente jóvenes en las escuelas secundarias locales de Lawrence y Lynn. Para ganarse el favor de estos nuevos reclutas, supuestamente apelan a su idioma y cultura compartida, el patriotismo dominicano y utilizan la apariencia de prosperidad y hermandad.
“Mis hijos vienen de Santo Domingo y yo me voy a mudar de aquí, porque no quiero que se críen aquí, en el ambiente que se respira aquí en Lawrence”, dijo a Telemundo Nueva Inglaterra José González tras el anuncio de un nuevo golpe de parte de las autoridades a esta pandilla en 2019.
Y es que, en cada arresto, es evidente que en muchas ocasiones caen jovencitos menores de edad como parte de sus miembros. En las acusaciones del miércoles, las autoridades identificaron a un joven de 15, que se apoda “Pinina”, y otro de 16, apodado “Kreepy”.
Se alega que los miembros son iniciados en la pandilla después de completar una "misión", que generalmente es un acto violento como tiroteos, palizas o peleas a puñetazos con miembros de pandillas rivales que tengan la misma edad o estatura. Según los documentos judiciales, tras la incorporación, los nuevos miembros son "bendecidos" formalmente en la organización durante una ceremonia formal, reciben juramentos del Supremo del Estado y se les otorgan collares ceremoniales. A los miembros más jóvenes se les asignan presuntamente funciones menores durante muchas "misiones" violentas, como estar de guardia durante un tiroteo, sostener u ocultar armas en nombre de los miembros de pleno derecho y transportar armas después de su uso en tiroteos.
Según los documentos de acusación, los Trinitarios se esfuerzan por proyectar poder a través de Internet y las redes sociales, otro eficaz anzuelo para alcanzar integrantes más jóvenes. Supuestamente producen música y videos musicales que muestran a miembros con los colores y ropa de los Trinitarios sosteniendo armas, dinero en efectivo y otros artículos, así como letras que alardean de violencia, drogas y otras actividades delictivas como advertencias y amenazas a otras pandillas rivales.
Sin embargo, con este nuevo golpe a la pandilla anunciado el miércoles, las autoridades dijeron que ahora esperan que las ciudades de la costa norte en Massachusetts puedan descansar mejor.
"Estuve allí esa mañana en Essex Street, solo horas después del tiroteo", dijo Tucker. "Podía ver el miedo, la ansiedad. Era palpable. Y tener la oportunidad de estar aquí hoy para cerrar ese círculo y asegurarnos de que trajimos justicia para esas familias, poder estar aquí hoy y hacer justicia, hay un cierto sentido de gratitud no solo para las familias sino también para las fuerzas del orden".
“Hoy, el reinado de terror de los Trinitarios en Massachusetts ha llegado a su fin”, expuso, por su parte, Foley.