La Oficina del Fiscal General de Rhode Island anunció el martes que se suspendieron los trabajos de demolición en el tramo en dirección oeste del Puente Washington.
WJAR informó que obtuvo una declaración de la Administración McKee y la Oficina del Procurador General, diciendo: "Los ingenieros de RIDOT, en cooperación con el equipo legal del estado, han llegado al punto en la demolición del Puente de Washington donde se debe pausar el trabajo para preservar las pruebas para el caso legal. El objetivo es poder continuar con la demolición lo más rápido posible y al mismo tiempo garantizar que se preserven las pruebas importantes”.
MANTENTE INFORMADO
 |
Mira sin costo Telemundo Nueva Inglaterra, 24/7, donde quiera que estés. |
 |
Recibe las noticias locales y los pronósticos del tiempo directo a tu email. Inscríbete para recibir newsletters de Telemundo Nueva Inglaterra aquí. |
No hubo información inmediata sobre qué evidencia específica la oficina del fiscal general busca preservar, o si los cierres de carreteras planeados continuarían.
El gobernador de Rhode Island, Dan McKee, anunció en agosto que el estado había presentado una demanda contra 13 empresas que proporcionaban servicios de diseño, construcción e inspección relacionados con el puente en problemas, que lleva la Interestatal 195 sobre el río Seekonk desde Providence hasta East Providence y sirve como puerta de entrada clave a Providence.
McKee dijo en ese momento que la demanda busca responsabilizar a las empresas responsables del casi catastrófico cierre del puente y recuperar los importantes recursos necesarios para reconstruir el puente y compensar al estado.
En la demanda, el estado argumenta que las empresas no identificaron oportuna y adecuadamente los problemas estructurales que empeoraban y que finalmente llevaron al cierre repentino e inesperado del puente.
Durante la demolición y construcción del nuevo puente, el estado está desviando seis carriles de tráfico (tres en cada dirección) en la estructura del puente en dirección este.
Por el puente pasan cerca de 100,000 vehículos cada día.
El cierre repentino en dirección oeste a mediados de diciembre inicialmente causó estragos en el tráfico, convirtiendo un viaje de 40 a 45 minutos en varias horas, dejando varados a los viajeros durante horas y haciendo que otros se desviaran de su camino normal. Algunas escuelas cerraron e impartieron clases a distancia.
