Una madre de New Hampshire fue sentenciada el viernes a más de 50 años de prisión por asesinar a su hijo de 5 años.
Danielle Dauphinais, de 38 años, se declaró culpable el mes pasado de esos cargos. Como parte del acuerdo, admitió haber cometido asesinato en segundo grado y manipulación de testigos.
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Elijah Lewis fue reportado como desaparecido en 2021 y fue encontrado muerto ese mismo año en una tumba sin nombre en Massachusetts.
El mes pasado, en el tribunal, nos enteramos de que el niño había sido desatendido, privado de comida y torturado antes de morir. El viernes, los fiscales dijeron que la muerte de Elijah se produjo después de muchos meses de "tortura continua" y pidieron la pena máxima, haciendo hincapié en que Dauphinais merece una sentencia acorde con el delito.
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Los familiares dieron declaraciones sobre el impacto de la víctima en las que cuestionaron por qué Dauphinais tomó las decisiones que tomó y nunca pidió ayuda.
"En cualquier momento, todo esto podría ser completamente diferente si lo hubieran traído a casa", dijo Timothy Lewis, el padre de Elijah, a través de una videoconferencia durante la audiencia.
Los fiscales dijeron que Dauphinais, a través de mensajes de Facebook y otros medios, expresó odio por su hijo y expresó su deseo de deshacerse de él en los meses previos a su muerte.
"No tengo ni una pizca de amor por él", escribió una vez en un mensaje de Facebook, según la fiscalía. Los fiscales alegan que Dauphinais hizo estos comentarios a pesar de haber sido la primera en expresar su deseo de pasar tiempo con su hijo, solicitando una visita que se prolongó hasta los últimos meses de su vida.
El abogado defensor, Benjamin Faulkner, argumentó que la conducta de Dauphinais se debía, en parte, a que había sido víctima de abusos en su propia infancia y que los hechos no sucedieron exactamente como afirmaba la fiscalía.
"Yo diría que siente un remordimiento total y profundo por lo que ha hecho. Ella sabe, señoría, que las cosas que le hicieron fueron las cosas que ella hizo, excepto que fueron peores”, dijo.
Dauphinais también se dirigió a la corte, intentando leer una carta que escribió ante el juez. En un momento, abrumada por la emoción, tuvo que pedirle a un abogado que terminara de leerla en su nombre. Dijo que lamenta profundamente sus decisiones.
“Estaba lidiando con tantas cosas en ese momento que mi juicio estaba extremadamente abrumada por mi propio trauma y problemas de salud mental no tratados. Estaba embarazada y en reposo en cama y todavía consumía drogas. He estado sobria durante tres años. Viviré con la culpa y la tristeza de haber participado en permitir que mi hijo muriera”, decía la carta.
El juez Charles Temple condenó a Dauphinais a 50 años a cadena perpetua en prisión por el cargo de asesinato y de tres años y medio a siete años de prisión, cumplidos consecutivamente con el cargo de asesinato, por los cargos de manipulación de testigos.
El novio de Dauphinais, Joseph Stapf, se declaró culpable de homicidio, agresión en segundo grado, falsificación de pruebas físicas y manipulación de testigos en 2022 en relación con la muerte del niño y fue condenado a entre 22 y 45 años de prisión.