Después de pasar la mayor parte de su vida en el Franciscan Children’s Hospital, Jesús Radon Santos, de 2 años, finalmente se fue a casa el miércoles.
Jesús nació prematuro a las 30 semanas y llegó al hospital de Boston con un respirador. Se fue el miércoles a un desfile de burbujas del equipo que lo vio crecer.
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"Muy feliz, yo estaba esperando este momento por mucho tiempo. El ya quiere hablar, se le entiende mucho mas las palabras, la mejor navidad, mi regalo de navidad", dijo Estrella Sanos Abreu, madre del pequeño Jesús.
"Ha pasado mucho tiempo para que esté con nosotros. Nuestro personal ha hecho un trabajo increíble", dijo Stephanie Hopkins, enfermera especializada en el Franciscan Children’s Hospital.
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Después de meses de fisioterapia, terapia ocupacional y terapia del habla, Jesús finalmente pudo quitarse la traqueotomía y ahora puede respirar por sí solo.
“Jesús siempre está feliz de jugar y relacionarse con todo el personal aquí, así que ha hecho un gran trabajo con su progreso”, dijo Allie McVey, fisioterapeuta del hospital.
Durante su estancia, el pequeño Jesús recibió la visita de jugadores de los Patriots y Los Bruins todo mientras aprendía a pararse, caminar, y correr.
Jesús ya camina y está aprendiendo a hablar y comer por sí solo.
