A nivel local, líderes comunitarios critican la decisión sobre el programa de asilo, puesto a que de una u otra forma contradice las acciónes actuales de la administración de Barack Obama.
El anuncio que hizo la Casa Blanca únicamente albergaría a ciertos refugiados de países como El Salvador, Honduras y Guatemala. Pero todavía existe la preocupación del futuro de quienes ya están aquí.
El alto comisionado de las Naciones Unidas para los refugiados conducirá proyecciones iniciales de los refugiados para determinar si son elegibles para recibir la condición de refugiados en Estados Unidos. Pero la coalición MIRA exige que también se revisen los casos de los que están en lista para ser deportados.
Los posibles refugiados serían rigurosamente examinados por múltiples agencias antes de poder poner un pie en Estados Unidos.
Agencias como el Departamento to de Justicia y el Departamento de Seguridad Nacional.
"Yo realmente considero que todo es político, pero la política no puede interferir en los derechos humanos de las personas que están pasando por situaciones de peligro", dijo Cristina Aguilera de MIRA.
Aguilera urge a que la comunidad continúe poniendo presión a líderes políticos locales y nacionales.