La administración de Biden aprobó una declaración de desastre mayor después de las inundaciones históricas del mes pasado en el oeste de Connecticut, según la oficina del gobernador Ned Lamont.
Lamont presentó formalmente la solicitud al presidente Joe Biden en busca de una declaración de desastre mayor a principios de este mes.
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La aprobación desbloquea fondos de la Agencia Federal para el Manejo de Emergencias para ayudar a los afectados por las inundaciones.
La oficina del gobernador dijo que la aprobación de los fondos ayudará a los propietarios de viviendas y empresas en los condados de Fairfield, Litchfield y New Haven que sufrieron daños catastróficos después de las graves inundaciones del 18 de agosto.
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En su solicitud, Lamont pidió específicamente la aprobación del Programa de Asistencia Individual, que reembolsa a los propietarios de viviendas y empresas algunos de los costos de reparación de daños a propiedades privadas no aseguradas.
El gobernador también solicitó fondos a través del Programa de Asistencia Pública, que reembolsa a los gobiernos estatales y locales algunos de los costos elegibles de reparación de daños a la propiedad pública, incluidas carreteras locales, puentes, líneas ferroviarias, sitios de infraestructura crítica, escuelas, parques y otras instalaciones.
En su carta a Biden del 9 de septiembre, Lamont señaló que las evaluaciones preliminares de daños de FEMA determinaron que la tormenta destruyó 19 casas.
Además, 170 viviendas sufrieron daños importantes, otras 133 viviendas se consideraron inaccesibles y 615 viviendas sufrieron daños menores según las directrices de FEMA, con otras 1,049 viviendas afectadas, según la carta.
La evaluación preliminar de daños de la Small Business Administration determinó que 77 empresas sufrieron daños importantes y 51 empresas recibieron daños menores.