Christian Martínez, de 29 años, originario de Palestine, Texas, es acusado de conspirar transportar a migrantes y contrabando mortal de migrantes. Este miércoles se declaró culpable.
SAN ANTONIO – Uno de los seis implicados en la muerte de 53 migrantes a bordo de un camión remolque en la que se considera la peor tragedia ocurrida en un intento de tráfico de personas desde México en la historia del país se declaró culpable este miércoles.
Christian Martínez, de 28 años y residente de Palestine, Texas, aceptó su culpabilidad por los cargos que se le imputaron luego de la tragedia en junio del 2022. El camión llevaba a 73 personas, y entre los fallecidos había 27 mexicanos, 14 hondureños, siete guatemaltecos y dos salvadoreños.
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Entre los cargos hay uno por conspiración para transportar extranjeros indocumentados con resultado de muerte y un cargo de conspiración para transportar extranjeros con resultado de lesiones corporales graves y destrucción de vidas en peligro.
Martínez y el coacusado Homero Zamorano Jr., quien era el conductor del camión-remolque fueron encausados el 20 de julio de 2022.
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Otros cuatro coacusados fueron identificados y acusados el 7 de junio de 2023. Ellos son Riley Covarrubias-Ponce, Felipe Orduña-Torres, Luis Alberto RiveraLeal y Armando Gonzales-Ortega.
Según la acusación formal, Martínez condujo a Zamorano al lugar donde recogió el camión-remolque vacío.
Orduña-Torres supuestamente proporcionó la dirección de Laredo en la que Zamorano cargó a los migrantes en el camión con remolque.
La acusación también alega que González-Ortega viajó a Laredo para encontrarse con el camión-remolque donde al menos 66 personas indocumentadas, entre ellas ocho niños y una mujer embarazada, fueron cargados para el contrabando.
Martínez, Covarrubias-Ponce, Orduña-Torres, Rivera-Leal y Gonzales Ortega coordinaron, facilitaron, se pasaron mensajes y se informaron mutuamente sobre el progreso del camión.
Está previsto que Martínez sea sentenciado el 4 de enero de 2024 y enfrenta una pena máxima de cadena perpetua en prisión.
QUÉ PASÓ ESE TRÁGICO DÍA
El incidente ocurrió en un remoto camino rural de San Antonio el 27 de junio. Los policías que llegaron al lugar detuvieron a Zamorano después de descubrirlo ocultándose en unos matorrales cercanos, según un comunicado de la fiscalía federal. Un inspección del celular de Zamorano reveló llamadas con Martinez sobre la operación de contrabando de personas.
Videos de cámaras de seguridad en un punto de revisión de la Patrulla Fronteriza revelaron que los rasgos del conductor coincidían con la descripción de Zamorano, según la acusación formal. Uno de los sobrevivientes, una guatemalteca de 20 años, dijo a The Associated Press que los traficantes habían cubierto el piso del remolque con lo que creía era caldo de pollo en polvo, aparentemente con la finalidad de despistar a los perros en el punto de revisión.
“La gente estaba gritando, algunos lloraban. Sobre todo las mujeres pedían que se detuviera y abrieran las puertas porque el camión estaba caliente y no podían respirar”, recordó Yenifer Yulisa Cardona Tomás, sobreviviente de la tragedia.
Cardona dijo que muchos de los migrantes a bordo llevaban agua, mientras otros no. El conductor y el copiloto ignoraron las súplicas mientras el camión ardía en su interior.
