“Fue el Papa del pueblo”: miles despiden a Francisco entre lágrimas y aplausos

La ceremonia privada para el entierro del papa Francisco duro 30 minutos y finalizó a la 1:30 pm hora local, en la Basílica de Santa María la Mayor de Roma, según informó el Vaticano en un comunicado.

El Cardenal Camarlengo Kevin Farrell presidió el entierro privado, y añadió que la ceremonia se celebró según las prescripciones del Ordo Exsequiarum Romani Pontificis.

“Durante la ceremonia estuvieron presentes cardenales de alto rango y familiares de Francisco”, refiere el comunicado.

Las autoridades en Roma calculan que unas 150,000 personas estuvieron presentes en el último adiós al Papa Francisco.

"Venía emocionada" dijo una de las jóvenes hispanas que viajaron desde EEUU a Roma para la canonización del joven italiano Carlo Acutis, que iba a celebrarse este 27 de abril, tras la muerte este lunes del papa Francisco.

Como inmigrantes, siempre estamos "tratando de encontrar la luz y vivir una vida mejor", dijo Emiliano Garcia conmovido en la Plaza San Pedro.

Cientos de personas esperan ver pasar el papamóvil que traslada el féretro del papa Francisco, antes de ser enterrado.

Los sediarios pontificios, vestidos de gala, son los encargados de cargar en sus hombros el féretro del papa Francisco, para regresarlo a la basílica San Pedro.

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El cardenal italiano Giovanni Battista Re realizó el rito aspersión con agua bendita antes de culminar la misa que se realiza en la Plaza San Pedro.

Más de 140 delegaciones internacionales asisten al último adiós del papa Francisco, quien pidió ser despedido como un discípulo de Cristo y no como un líder poderoso.

Unas 200,000 personas asistieron a la misa del funeral del Papa, en donde frente al féretro de Francisco, están sentados en las primeras filas, los presidentes y líderes mundiales.

La asignación de los asientos sigue un estricto protocolo que se establece por orden alfabético de los países en francés.

El presidente de Gabón, Brice Clotaire Oligui Nguema; la primera dama de Francia, Brigitte Macron; el presidente de Francia, Emmanuel Macron; el presidente de Finlandia, Alexander Stubb; el presidente de Estados Unidos, Donald Trump; la primera dama de Estados Unidos, Melania Trump; el presidente de Estonia, Alar Karis; el rey Felipe VI de España; la reina Letizia de España; y el presidente de Ecuador, Daniel Noboa, se encuentran entre los asistentes.

Además, los fieles están alrededor en la plaza de San Pedro y las calles cercanas al Vaticano.

El cardenal Giovanni Battista Re, decano del colegio cardenalicio, destacó el trabajo constante del papa Francisco a favor de los pobres, así como sus esfuerzos para cesar las guerras durante la homilía de la eucaristía en la Plaza San Pedro.

"Alzó su voz implorando la paz e invitando a un llamando a la sensatez, a la negociación honesta, para encontrar posibles soluciones porque la guerra es solo muertes de personas, destrucción de casas hospitales y escuelas", dijo Battista Re.

Battista Re también enumeró los gestos de misericordia del Papa en favor de los pobres y migrantes. "El Papa Francisco siempre puso en el centro el Evangelio de la misericordia, resaltando constantemente que Dios no se cansa de perdonarnos: Él perdona siempre, cualquiera sea la situación de quien pide perdón y vuelve al buen camino", dijo el cardenal.

Durante el funeral en la Plaza de San Pedro del Vaticano, colocaron el evangelio sobre el féretro de Francisco.

Serhiy Nykyforiv, el portavoz del presidente de Ucrania,​​ dijo a a NBC News vía WhatsApp sobre la reunión que tuvo Volodymyr Zelenskyy con el presidente Donald Trump.

"La reunión se celebró y ya ha finalizado", dijo el vocero de Zelenskyy.

Mas tarde el gobierno de Ucrania dijo en Telegram que la reunión entre ambos fue en la Basílica de San Pedro. "Los líderes acordaron continuar las negociaciones. Los equipos están trabajando para organizar la continuación de la reunión. Así lo informó el portavoz presidencial Nikiforov al público".

El féretro sale de la Basílica San Pedro y lo colocan en el medio de un altar frente a miles de personas en la plaza que está ubicada frente al Vaticano.

El expresidente de Estados Unidos Joe Biden y su esposa Jill viajaron a Roma para asistir este sábado al funeral del fallecido papa Francisco, según confirmó su oficina a diversos medios y agencias internacionales.

Biden, un católico practicante, mantenía una relación cercana con el pontífice desde su visita a territorio estadounidense en 2015, cuando el político demócrata era vicepresidente.

La oficina de Biden detalló que el matrimonio Biden viajó de manera independiente y no compartió vuelo con el presidente, Donald Trump, quien también asiste al funeral en compañía de la primera dama.

Biden expresó a lo largo de los años una especial admiración por Francisco. De hecho, conservaba una foto de ambos en la Oficina Oval.

El papa disfrutará de un último paseo entre los fieles en uno de sus apreciados papamóviles.

El Vaticano informó que, para la procesión fúnebre del sábado, su féretro se colocará en la parte trasera de un papamóvil utilizado durante su viaje a Filipinas en 2015.

El vehículo ha sido modificado para que el féretro sea visible para los dolientes a lo largo del recorrido de casi 4 kilómetros (2.5 millas) desde la Basílica de San Pedro hasta su lugar de entierro.

El papa disfrutó de ser conducido entre multitudes de fieles, ya sea en la Plaza de San Pedro o en alguno de sus numerosos viajes al extranjero.

Una monja francesa que viajó para despedirse del papa Francisco en el Vaticano esta semana pudo romper el protocolo eclesiástico. Su imagen doliente en video conmovió al mundo y este sábado se le recuerda, mientras ella permanece en la Plaza de San Pedro junto a personas de la comunidad LGBTIQ+.

La hermana Geneviève Jeanningros, de 81 años, mantuvo una estrecha amistad durante cuatro décadas con el difunto papa.

En un video grabado a los dolientes en la Basílica de San Pedro, se puede ver a Jeanningros de pie en un área tradicionalmente reservada para cardenales, obispos y sacerdotes, cargos ocupados exclusivamente por hombres.

En el video, se la ve rezando junto al féretro del papa durante varios minutos antes de despedirse por última vez. La hermana Jeanningros solía reunirse con el pontífice cada miércoles, durante las tradicionales audiencias.

HOUSTON - Hace más de nueve años, una madre mexicana vivió el momento más inolvidable de su vida cuando su hijo menor, Ricky, abrazó al papa Francisco durante su visita a la Ciudad de México en febrero de 2016. Hoy, desde Houston, comparten con Telemundo el regalo que ese encuentro les dejó: esperanza, fe… y vida.

Belén Padilla nunca imaginó que sus súplicas serían escuchadas. Después de enfrentar el devastador diagnóstico de un tumor cerebral maligno y extremadamente raro en su hijo de apenas cuatro años, lo que parecía una simple gripe se convirtió en una lucha contra el cáncer. “Mi mundo se me vino abajo”, recuerda.

Con el alma aferrada a la fe, Belén viajó con Ricky para ver al papa. Apenas una semana antes, los médicos le habían informado que la quimioterapia había reducido el tumor a la mitad.

Dos semanas después del emotivo abrazo con el pontífice, llegó la noticia más esperada: el tumor había desaparecido.

La tumba del papa Francisco en la Basílica de Santa María la Mayor se construyó con materiales de la región italiana de Liguria. Es una tumba sencilla que solo lleva la inscripción "Franciscus" y una reproducción de la cruz pectoral del difunto pontífice.

La tumba se encuentra cerca del Altar de San Francisco, en el nicho de la nave lateral, entre la Capilla Paulina (Capilla Salus Populi Romani) y la Capilla Sforza. En declaraciones televisivas, el coarcipreste de la Basílica, el cardenal Rolandas Makrickas, anunció el deseo del papa Francisco de ser enterrado en una tumba hecha con la "piedra de Liguria, la tierra de sus abuelos".

De Italia a Argentina

Precisamente en la pequeña localidad de Cogorno, una placa de pizarra —una roca metamórfica de grano fino de color gris, verde o azulado— conmemora al bisabuelo de Bergoglio, Vincenzo Sívori, quien viajó de Italia a Argentina en el siglo XIX. Allí crió a su familia, incluyendo a su nieta Regina Maria Sívori, madre del papa Francisco.

El sábado, los dolientes habituales se congregaron para conseguir un lugar de pie cerca de la parte trasera de la plaza que rodea el antiguo obelisco, detrás de los asientos VIP.

El área a la izquierda del altar mayor, subiendo las escaleras de la basílica, está reservada para los celebrantes y la jerarquía católica, mientras que los líderes mundiales y la realeza se sentarán a la derecha.

Muchos corrieron hacia la plaza al abrirse paso ante las barricadas. Algunos portaban pancartas conmemorativas del Año Santo Jubilar que Francisco inauguró en diciembre y que continuará a pesar de su fallecimiento el lunes a causa de un derrame cerebral.

El papa Francisco eligió la Basílica de Santa María la Mayor, cerca de un icono de la Virgen que veneraba, como reflejo de su vida humilde, sencilla y esencial, declaró el viernes el arzobispo que administra esa basílica.

Francisco, quien falleció el lunes a los 88 años, será enterrado el sábado en una tumba de nicho en la basílica, tras su funeral en la Plaza de San Pedro, a unos 4 kilómetros (2.5 millas) de distancia.

Francisco se mostró inicialmente reticente cuando el arzobispo Rolandas Makrickas sugirió en mayo de 2022 que eligiera Santa María la Mayor como su última morada. Makrickas la había elegido por la larga vinculación del pontífice con la basílica, sus vínculos con la orden jesuita de Francisco, su patrimonio artístico y espiritual y sus vínculos con el papado. Otros siete papas están enterrados allí, pero ninguno desde 1669.

En Primero, "dijo que no porque los papas están enterrados en San Pedro", declaró Makrickas a la prensa en las escaleras de la basílica. "Después de una semana, me llamó a Santa Marta (su casa en el Vaticano) y me dijo: 'Prepara mi tumba'".

CIUDAD DEL VATICANO - El papa Francisco es recordado por haber combatido los "crímenes" cometidos por representantes del clero contra menores y personas vulnerables, según se lee en el rogito, el acta sobre su vida que será introducido en su féretro.

"Hizo más severa la legislación sobre crímenes cometidos por los representantes del clero contra menores y personas vulnerables", se lee en la última línea de este documento, en el que se recuerda su vida y los puntos más destacados de su pontificado.

El texto, que fue introducido en el féretro dentro de un tubo de metal sellado y lacrado para la posteridad, comienza con la biografía de Jorge Bergoglio, nacido en Buenos Aires en 1936, hijo de emigrantes italianos, sus estudios en química o su ingreso en la Compañía de Jesús.

"Fue un pastor simple y muy amado en su arquidiócesis, que viajaba en metro o en autobús. Residía en un apartamento y se preparaba la cena solo porque se sentía uno más entre la gente", destaca.

CIUDAD DEL VATICANO - Después de tres días en el que recibió el cariño y el respeto de cientos de miles de files católicos, este viernes fue cerrado el ataúd donde reposa el papa Francisco, en una ceremonia llena de simbolismo.

En primer lugar, el maestro de ceremonias colocó un velo de seda blanca sobre el rostro del pontífice para después rociar el cuerpo con agua bendita mientras los presentes oraban.

Dentro de la caja se introdujo una bolsa con algunas monedas y medallas acuñadas durante el pontificado y un tubo metálico con el acta o "rogito", sellado y lacrado, que recoge para la posteridad los hechos más relevantes de su vida y de su papado.

En este documento, en latín, Francisco es recordado por su sencillez, por su atención a los "últimos y descartados de la sociedad", por su preocupación por el medio ambiente y por su lucha contra los abusos perpetrados por representantes del clero.

CIUDAD DEL VATICANO - El difunto papa Francisco será sepultado dentro de un féretro sencillo, sellado y marcado con su escudo pontificio en una ceremonia antigua y solemne este viernes en la basílica de San Pedro, y reposará con sus zapatos usados.

La ceremonia fue presidida de forma privada por el cardenal camarlengo, Kevin Joseph Farrell, en el interior de la basílica vaticana una vez que se terminó la capilla ardiente y después de tres días en los que han pasado 250,000 fieles a darle el último adiós.

Francisco ha sido expuesto públicamente dentro de un ataúd sencillo de madera, mientras que hasta Benedicto XVI los papas eran expuestos sobre un catafalco. Bergoglio cambió el protocolo.

Pero, después de tres días, este viernes fue el momento de cerrar el féretro con una antigua ceremonia cargada de simbolismo y oración por su alma.

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La despedida solemne al papa Francisco congrega este sábado en el Vaticano a una amplia presencia internacional, incluida una participación destacada de líderes de América, encabezados por los presidentes de Estados Unidos, Argentina y Brasil.

Desde Washington, el presidente Donald Trump junto a la primera dama, Melania Trump, arribaron a Italia la noche del viernes en una muestra del peso simbólico del pontífice latinoamericano en el escenario global. El mandatario de EEUU y su esposa regresarán al país la noche del sábado.

También asiste el mandatario brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, acompañado por su esposa, Janja, y el presidente argentino, Javier Milei, quien llega junto a su hermana Karina —secretaria general de la Presidencia— y varios ministros, entre ellos el canciller Gerardo Werthein.

En el plano regional, se suman los presidentes de Ecuador, Daniel Noboa, y República Dominicana, Luis Abinader —quien está acompañado de su esposa, Raquel Arbaje, y el presidente de la Cámara de Diputados, Alfredo Pacheco—, reforzando así una participación de alto nivel político desde América Latina.